miércoles, 20 de noviembre de 2013

"ME IMPORTA UN HUEVO"

Ayer fui al CRA Riscos de Villavieja en Barrado a evaluar la actividad que he llevado a cabo con el alumnado de 5º y 6º de Primaria. Su profesora, Victoria quiso trabajar la responsabilidad y lo que ello conlleva con su alumnado con la actividad que le propusimos. He de decir que esta actividad la llamábamos "este huevo es cosa de dos" pero después de haber trabajado con esta clase adoptamos el renombre que le dio Victoria "Me importa un huevo", ya que había un alumno que estaba sólo. Así que, gracias. Aquí podéis ver un resumen de lo que hice el primer día cuando fui a su clase el martes pasado.

Os pongo en situación. La actividad consiste en cuidar un huevo por parejas o individualmente (dependiendo de la clase si son pares o impares), buscando un reparto del cuidado, equitativo y consensuado, entre los miembros de cada pareja durante una semana. 

Al acudir a la clase para realizar la evaluación de cómo había ido la semana de cuidado, notaba que esta actividad había generado un montón de emociones de las que seguro sería interesante escuchar y compartir. La de cosas que implica cuidar...responsabilidad, emociones positivas (ilusión, confianza, entusiasmo), emociones negativas (decepción con la pareja, enfado, tristeza, indiferencia...). Cuidar, dificultades, facilidades...

La sesión de evaluación comenzó pasando a  nivel individual la siguiente hoja.

Recogida la información junto con la hoja de evaluación de padres y madres, pasamos a escuchar cómo se habían sentido con esta actividad, cómo lo habían vivido ya fuera en pareja o en soledad. En este momento me encontré con diferentes situaciones:

1. Parejas que se han divertido: desarrollando su creatividad (prueba de ello son las fotos de lo que han creado para el huevo), compartiendo con la pareja, haciendo un reparto equitativo del cuidado ("un día te lo llevas tú, otro día yo"). Me decían "he aprendido que cuidar es fácil porque escuchas lo que quiere la otra persona y tú dices lo que quieres y llegas a un acuerdo y no tiene que ser siempre lo que una dice", "he aprendido a tomar decisiones juntas" "me ha gustado la actividad porque he aprendido a cuidar y porque he tenido que hacer una casa".

2. Soledad por elección: "cuidar en soledad es complicado, porque mientras que los demás tenían con quién dejarlo, yo lo tenía que hacer todo solo. También me he sentido bien cuando otros compañeros me echaban una mano con el cuidado de mi huevo, para que yo pudiera jugar".

3. Parejas que lo han vivido en soledad: a pesar de estar en pareja, un miembro ha tomado decisiones sin tener en cuenta a la otra persona. Esto ha llevado a diferentes situaciones:
  • tras un accidente el huevo se ha roto. Una persona de la pareja se ha sentido responsable del accidente y triste. Para solventarlo ha querido tener otro huevo. La otra persona de la pareja se sentía enfadada porque le echaba la culpa por haber descuidado al huevo. Del nuevo huevo no quería saber nada. 
  • un miembro de la pareja toma decisiones de manera unilateral respecto al huevo, que es compartido. La persona ignorada se ha sentido enfadado, triste, desilusionado, decepcionado tal vez ya que la otra persona vive ajena a cómo está viviendo el proceso. 
En ambas situaciones quien elude la responsabilidad del cuidado del huevo intenta justificar su comportamiento echando mano de su argumentario particular para esa situación "tenía muchos deberes" "no me gustaba el huevo que teníamos en un principio y yo quería que tuviese otra sonrisa". En este caso lo que he hecho ha sido que cada quien hablara de cómo ha vivido el proceso del cuidado del huevo, que se escucharan y cada quien se responsabilice de lo que ha hecho, admitiendo errores y con honestidad lo reconozca públicamente.

Llegados a este punto ¿qué he hecho? preguntarles a cada persona implicada "¿qué hubieras necesitado para sentirte mejor?" Sus respuestas han sido lo mejor... "otra oportunidad", "un poco de confianza".

Lo mejor de esta actividad es que sirve para trabajar las emociones, hablar de ellas, tomar conciencia de qué hacemos cuando sentimos una emoción negativa, si tenemos en cuenta a la otra persona, etc. Así que a mí esta actividad me importa. Y mucho.





Desde aquí mi mayor agradecimiento a Victoria Guerrero, la profesora, que ha permitido que fuera a su clase para trabajar con su alumnado con esta actividad. MUCHAS GRACIAS!


Si queréis ponerla en marcha os dejo aquí la información necesaria o si queréis que vaya al colegio en el que estáis poneros en contacto con nosotras. Estamos en la Mancomunidad Valle del Jerte.










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